Salvador posee una populación estimada en más de 2,6 millones de habitantes. Es considerada la ciudad más poblada de la región del Noreste y es la tercera mayor capital del país. La economía de Salvador está en crecimiento, principalmente por el Sector del Turismo. La ciudad es uno de los destinos turísticos más importantes de Brasil, y recibe anualmente millones de turistas de otras capitales y ciudades del país, como de diferentes partes del mundo. El Aeropuerto Internacional de Salvador, Luis Eduardo Magalhães, es considerado como el más grande de la región Norte - Noreste  y Sur, y como si fuera poco, ocupa el 5to lugar con relación al tránsito de pasajeros del Brasil.  El turismo en Salvador genera números increíbles, además de las bellas playas y regiones turísticas repartidas por todo el estado,  el Carnaval es uno de los grandes responsables por el desenvolvimiento  turístico y económico de Salvador.  Según los datos de la empresa de Turismo de Bahia (Bahiatursa), el festival de Carnaval en Salvador genera un movimiento de aproximadamente R$ 600 millones en la ciudad.
Antes del surgimiento del turismo en Salvador, la economía de la ciudad surgía de la exportación de productos como el azúcar (período colonial) y más tarde le seguía el cacao. Salvador fue colonizado por pueblos europeos, indios y negros. En el inicio de su colonización, la ciudad contaba como base de economía, el comercio de la producción de los ingenios. A finales del Siglo 19 la economía bahiana gano una nueva perspectiva. La producción de cacao paso a ser la “estrella” de la economía en la Bahia y 20% del presupuesto del estado se debía a la producción de cacao. A causa del crecimiento de la producción y también de la exportación de cacao, surgieron diversas iniciativas de industrialización. En el año 1.904 existían cerca de 141 fábricas y manufacturas, de las cuales, doce estaban vinculadas a hilar y tejer, doce eran fábricas de tabaco, cuatro de cerveza y tres eran fábricas de calzado. Durante la década del 60 la economía bahiana obtuvo una aceleración  por la creación del centro industrial de Aratu y por la promoción de la agricultura en la cuenca de San Francisco.
En los años siguientes, la economía de la Bahia creció debido a las iniciativas políticas e incentivos implementados en el estado, como el polo petroquímico de Camaçari,  el cual fue instalado en 1.978. Fue en este período que el Turismo comenzó a surgir, volviéndose  la base principal de la economía bahiana. Al mismo tiempo, desde otro punto opuesto, el principal producto exportado, el cacao, comienza a sufrir una fuerte crisis generada por la plaga “escoba de bruja”, un insecto que atacó las plantaciones de cacao. La crisis de la “escoba de bruja” provoco que la producción cayese vertiginosamente y desencadenase en una fuerte crisis económica y alto desempleo en las regiones bahianas que producían cacao.
Gracias a la fuerza de voluntad y creatividad de los bahianos, la crisis del cacao fue superada y las demás ciudades bahianas, se fortalecieron a través de otros sectores. Hoy,  Salvador es sede de grandes empresas nacionales e internaciones y es la ciudad más desenvuelta económicamente en la Bahia, generada por la producción comercial e industrial.  Además de industrias y empresas que generan múltiplos empleos, Salvador es sede de varios eventos deportivos, turísticos, entre otros.